Escrito por José Luis Peña.
Una cámara térmica o termográfica es un dispositivo electrónico que a través de sensores de radiación calorífica de cuerpos varios detectados, muestran unas imágenes en tonalidades de colores que van del rojo al azul, siendo el color rojo quien indica una temperatura muy alta y el azul por el contrario nos indica una baja temperatura.
Las cámaras térmicas también son utilizadas en el campo de seguridad a través de sistemas de CCTV, cada proveedor de sistemas de seguridad se ha encargado de introducir esta tecnología en sus productos; utilizando software para analítica de video han sabido adecuar muy satisfactoriamente la termografía a sus cámaras de seguridad, logrando detectar el calor que emiten personas, maquinaria, vehículos, etc., todos estos en total oscuridad o en clara desventaja visual como en sombra, niebla, tras arbustos, etc.
VENTAJAS
- Las cámaras térmicas tienen mayor aprovechamiento en situaciones de baja luminosidad, logrando generar imágenes muy nítidas en total oscuridad; en diferencia las cámaras clásicas que requieren una emisión de luz externa para poder visualizar mejor o la mayoría cuenta con sensores IR que no mejora adecuadamente la visión.
- Debido a su naturaleza, las cámaras térmicas no tienen limitaciones como camuflajes u obstáculos visuales (niebla, humo), puesto que estas detectan el calor emitido.
- No pierde campo visual por destellos hacia su lente como ocurre con las cámaras clásicas.
- Pueden detectar amagos o pequeños focos de incendio, previniendo posibles catástrofes.
- Pueden generar un gran ahorro, al necesitar una sola cámara térmica para abarcar un perímetro, que en situaciones convencionales requeriría muchas cámaras.
- Permiten privacidad de identidad.
- Sus aplicaciones son efectivas tanto de día como de noche y bajo todas las condiciones climáticas.